El Centro de Interpretación de Reciclaje fue inaugurado en el Parque Tecnológico Valdemingómez (Madrid).

Entre otras piezas, se solicitó un juego interactivo multi-usuario que pudiera ser jugado por 2 equipos diferentes, para reforzar la acción didáctica.
Este juego consistía en una pieza multimedia con animaciones en la que dos grupos de varios estudiantes jugaban juntos respondiendo preguntas sobre el reciclaje.
Para la interacción, se consideró un sistema de visión por computadora.

Después de hacer una pregunta, los niños levantaron un disco con 2 caras (verde = SÍ, rojo = NO). Las cámaras deben capturar la variación de color y proporcionar al juego una respuesta porcentual.

Contratado por Artempus, Colorao programa el sistema de votación óptica y lo integra a la lógica del juego (desarrollado por otros).

Este sistema analiza la secuencia de la cámara, extrae la información del color y la compara con una secuencia neutra. Dependiendo del color, realiza una aproximación porcentual y pasa estos valores al juego, que responden a él.

La aplicación se montó en una pantalla táctil con una interfaz muy simple que permite a los moderadores controlar el ritmo del juego y las votaciones.

Como el juego se jugó en una sala con iluminación natural, los valores de los rayos podrían cambiar dependiendo de la hora del día o del exterior, alterando así la precisión de la medición.

Para resolver este problema, Colorao también incluyó un sistema de calibración de color para que se pudiera ajustar a cada votación y así lograr los resultados más precisos posibles.